Tenemos que comenzar dando las gracias, no hay palabras para describir lo que vivimos aquel día.
Desde el primer momento que estuvimos en Bodegas Lalanne y conocimos a Leonor no tuvimos ninguna duda de celebrar nuestra boda allí, y lo volveríamos a repetir mil veces sin cambiar absolutamente nada. Todo fue espectacular, empezando por las bodegas que tienen un encanto especial, la comida fue perfecta y el trato de Laura y Leonor no pudo ser mejor, hicieron que todo el mundo disfrutaratanto como nosotros.
Un año más tarde la gente nos sigue recordando ese día, recordando cada detalle y que todo salió perfecto, y todo ello fue gracias a todo el equipo de Bodegas Lalanne.